La sobrecarga laboral es una situación común, hay personas que deciden ocuparse de más trabajo del que pueden para tener los ingresos suficientes para desentenderse de crédito rápido sin documentación y todo otro tipo de financiamiento externo.
A pesar de lo anterior, y cómo habrás apreciado, la sobrecarga laboral afecta negativamente otros aspectos de tu vida, por lo que han de diseñarse estrategias para enfrentarla. Los siguientes dos apartados son dos de esas estrategias.
Organizar mejor tu tiempo
Una mayor carga laboral implica reorganizar tu tiempo para que no disminuyas tu rendimiento laboral ni para que los otros roles de tu vida salgan perjudicados. Se trata de equilibrar todas tus facetas en pro de una vida íntegra y que te satisfaga. Es difícil al principio, pero se hará más fácil en el camino.
Colocar tareas y objetivos por día es bastante útil, te ayuda a reconocer qué cosas deberías hacer con el tiempo libre disponible y en qué bloques de la jornada lo pudieras hacer. La secuencia de las tareas u objetivos va de la mano con su urgencia, no deberías dejar cosas para última hora en pro de realizar de inmediato asignaciones que puedes entregar más adelante.
Despertar temprano aumenta el tiempo disponible, pero sacrifica descanso. Algunas personas deciden madrugar para abordar todo lo que tienen pendiente, desarrollando un horario de sueño que les impulsa a dormir a las 7 u 8 de la noche para levantarse a las 3 o 4 de la madrugada. Es una estrategia interesante e inteligente, pero que puede tener consecuencias a largo plazo en materia de salud.
Reducir la carga laboral
Algunos no pueden con la sobrecarga y eligen reducir carga laboral, una decisión beneficiosa para todos los ámbitos de la vida que fueron relegados en pro del trabajo. Habla con tus superiores si no te sientes cómodo con las responsabilidades que debes asumir, probablemente te escuchen y decidan liberarte de algunas de ellas.
Con la reducción de carga laboral ganarías menos dinero, lo cual te haría más dependiente de préstamos inmediatos y el financiamiento externo en general. La pérdida de independencia financiera es un factor que impide que las personas trabajen menos porque los convence de que cargas laborales muy grandes les permitirán tener un mayor control de su vida, lo que es cierto.
Reducir la carga laboral no es un signo de debilidad, eso no indica que seas incompetente ni insuficiente para el trabajo, sino que actualmente no estás en la situación adecuada para asumir todas esas responsabilidades.